Su fragancia es fascinante. Con un alma que refleja tanto oscuridad como luz, se trata de una fragancia oriental floral con una sensualidad inquietante y un carácter distintivo indescifrable. Una fragancia que persigue y atrae a la vez. Ingredientes poco comunes se reúnen dentro de un talismán con forma de lágrima, un cristal que parece sacado de una araña de luces, translúcido, pero oscuro y secreto.
Notas de salida: tomillo blanco, mandarina, azafrán. Notas de corazón: lirio, ylang-ylang. Notas de fondo: madera de roble, haba tonka.